En La Termoteca creemos que los pequeños gestos del día a día pueden marcar una gran diferencia. Cambiar una botella de agua de plástico por un termo reutilizable puede parecer un detalle menor, pero detrás de ese gesto hay un impacto real: menos residuos, menos energía desperdiciada y un consumo más consciente.
Usar un termo a diario no solo mejora tu rutina, también ayuda a cuidar el entorno. Hoy te contamos cuánto plástico evitas, por qué importa tanto y cómo este cambio sencillo puede tener un efecto positivo duradero.
El problema del plástico en cifras
Cada año se producen más de 400 millones de toneladas de plástico en el mundo. Una parte enorme se destina a envases de un solo uso: botellas, vasos y tapones que, en la mayoría de los casos, terminan en vertederos o en el mar.
En España, una persona puede llegar a utilizar más de 100 botellas de plástico al año. Si haces el cálculo, un simple termo reutilizable puede evitar cientos de envases a lo largo de su vida útil.
Además, los plásticos no desaparecen. Se fragmentan en piezas diminutas llamadas microplásticos, que ya se encuentran en el agua, el aire y los alimentos. Reducir su consumo es una de las formas más efectivas de frenar su propagación.
¿Por qué elegir un termo?
Los termos son una alternativa práctica y sostenible. Están diseñados para durar años, mantienen la temperatura durante horas y reducen la necesidad de envases desechables.
En La Termoteca seleccionamos termos fabricados en acero inoxidable de alta calidad, libres de BPA y con aislamiento al vacío (según modelo). Este material no libera sustancias nocivas, no retiene olores y puede reciclarse por completo.
Al utilizar tu termo cada día, evitas generar residuos y contribuyes a un consumo más responsable. Es un pequeño hábito con un gran efecto: si millones de personas hicieran lo mismo, el impacto sería enorme.
¿Cuánto plástico evitas realmente?
Veámoslo con un ejemplo sencillo.
Si sueles beber una botella de agua al día, en un año habrás usado más de 350 envases de plástico. Con un solo termo, esa cifra se reduce a cero.
Lo mismo ocurre con el café para llevar: si cada mañana usas tu propio termo, dejas de generar decenas de vasos desechables al mes.
Cada termo que te acompaña evita la producción, transporte y desecho de cientos de botellas y vasos de un solo uso. Y eso significa menos emisiones de CO₂, menos energía gastada y menos residuos que acaban en el medio ambiente.
Preguntas frecuentes
¿Los termos también contaminan?
Todo producto tiene una huella de fabricación, pero el impacto de un termo reutilizable se amortiza muy rápido. Después de unos pocos usos, ya compensa la energía empleada en su producción frente al plástico desechable.
¿Qué materiales son los más sostenibles?
El acero inoxidable es una de las mejores opciones: es duradero, reciclable y seguro para alimentos. En La Termoteca trabajamos solo con termos libres de BPA y con acabados resistentes al paso del tiempo.
¿Puedo usar el mismo termo para café y agua?
Sí, pero conviene enjuagarlo entre usos para que no se mezclen los sabores. Si lo usas para café o té, una limpieza semanal más profunda mantendrá el interior impecable.
¿Qué pasa con los microplásticos?
Al reducir los envases de plástico de un solo uso, también se reduce la liberación de microplásticos al medio ambiente. Es una forma directa de proteger los ecosistemas y nuestra salud.
Más allá del gesto
Usar un termo es más que una costumbre práctica. Es una declaración silenciosa de cómo queremos consumir: con responsabilidad, sin renunciar al diseño ni a la comodidad.
En La Termoteca elegimos termos que duran, que conservan la temperatura durante horas y que pueden acompañarte durante años. Creemos que los objetos bien hechos, los que se cuidan y se valoran, son los que realmente cambian las cosas.
Cada vez que llenas tu termo en lugar de abrir una botella de plástico, estás participando en un cambio necesario. No hace falta hacerlo perfecto: basta con empezar.